No hay ninguna entrada. Mostrar todas las entradas
No hay ninguna entrada. Mostrar todas las entradas
Suscribirse a:
Entradas (Atom)
«Una carta parece poca cosa [...]; sin embargo, las palabras pueden hacer las cosas: ―¡Apunten, fuego! ―y hay un cadáver en el suelo; ―¡Vete!, ya no te quiero ―algo como eso fue lo último que escuchó un suicida. Una carta entregada en mano por un mensajero, una confesión epistolar, una idea escrita y enviada por vía postal, muchas veces fueron el germen de una revolución, de un invento [...]» (Gonzalo Ugidos, "Cartas que cambiaron el mundo"; Jde Ed. Madrid, octubre 2008)